Las creencias populares tienen raíces antiguas y a menudo se mezclan con supersticiones y tradiciones orales. Muchas de ellas se refieren al hogar, especialmente al dormitorio. Entre las supersticiones más extendidas está la que sugiere no hacer la cama de tres en tres, ya que se cree que la persona más joven podría morir prematuramente. Otras creencias populares son la prohibición de colocar ciertos objetos sobre la cama, como un sombrero, y la creencia de que nunca se debe dormir con los pies girados hacia la puerta del dormitorio. Pero, ¿por qué?
¿Por qué no dormir con los pies mirando hacia la puerta?
La práctica de no dormir con los pies hacia la puerta del dormitorio tiene raíces culturales y corresponde a supersticiones de muchas culturas. Se desconoce el origen exacto de esta creencia, pero es posible distinguir cuatro razones principales por las que esta tradición ha sobrevivido hasta nuestros días.
Superstición
Las creencias supersticiosas son comunes en muchas culturas y a menudo influyen en las prácticas cotidianas, incluidas las relacionadas con el sueño. Aunque no existen pruebas científicas de que dormir con los pies en la puerta traiga mala suerte, las supersticiones pueden influir en los hábitos y creencias de las personas, impulsándolas a actuar de formas específicas para evitar supuestos riesgos o desgracias.
Seguridad
Históricamente, muchas culturas se han preocupado por la seguridad durante el sueño. En épocas anteriores, cuando la seguridad personal era más precaria, la posición del cuerpo durante el sueño podía influir en el grado de protección percibido. Mantener la cabeza alejada de la entrada podría considerarse una opción más segura, ya que permite ver quién entra en la habitación y reaccionar rápidamente en caso de peligro.
Respeto por el difunto
En algunas tradiciones funerarias, colocar al difunto con los pies mirando hacia fuera de la habitación se considera importante para permitirle «salir» del espacio terrenal y pasar al más allá. Dormir en esa posición podría considerarse una especie de imitación de este ritual, lo que podría verse como una falta de respeto hacia el difunto o como algo que trae mala suerte.
Feng Shui
El Feng Shui es el antiguo arte chino de decorar los espacios en armonía con las energías naturales. Según los principios del Feng Shui, la energía, o «chi», fluye por los espacios e influye en la vida de las personas. Colocar el cuerpo en determinadas direcciones mientras se duerme puede influir en el flujo de energía de la habitación. Dormir con los pies hacia la puerta se considera desfavorable porque se cree que la energía positiva puede salir de la habitación por la salida, reduciendo el bienestar y el equilibrio en el entorno doméstico.
Lo ideal es colocar el cabecero contra una pared sólida y estable, preferiblemente una pared que esté lo más alejada posible de la puerta. Esto proporciona una sensación de estabilidad y seguridad mientras se duerme. En cambio, la cama debe orientarse de modo que pueda ver la puerta sin estar directamente en línea con ella.
¿Qué ocurre si se duerme con los pies hacia la puerta?
Tras explorar todos los campos posibles para comprender el origen de esta creencia, no existe una explicación definitiva y científica de por qué no se debe dormir con los pies hacia la puerta, pero es una práctica que tiene raíces culturales y supersticiones en muchas partes del mundo. Por lo tanto, quien quiera dormir con los pies mirando a la puerta es libre de hacerlo, con el único riesgo de violar una antigua y extendida tradición o creencia en sentido contrario.
Fuente. Idealista