La gestión de residuos es una parte esencial de la vida urbana. Los contenedores de basura son un objeto clave para mantener la limpieza y la higiene en las ciudades. Sin embargo, a veces pueden estar ubicados en lugares que resultan molestos para las personas que viven cerca de ellos. ¿Puedo cambiar los contenedores de basura de la calle si me molestan? ¿Qué normativa lo regula? Esto es lo qué se puede hacer.
Los contenedores de basura frente a la fachada de casa es un problema que afecta a muchas viviendas unifamiliares y chalets, más si se arroja la basura de forma indebida, queda en el exterior o el servicio de recogida y limpieza no es suficiente. La basura perjudica evidentemente a quienes más cerca de ella están y puede ocasionar problemas de salud, malos olores o plagas.
Además de los riesgos de salud, es un problema más grave de lo que en un primer momento se puede pensar: puede depreciar el valor de una vivienda o incluso impedir que se venda. Los potenciales compradores advertirán en una visita los residuos y muchos se echarán para atrás. ¿Qué se puede hacer si los contenedores están junto a tu casa?
¿Quién decide dónde van los contenedores?
La ubicación de los contenedores de basura suele estar regulada por las ordenanzas municipales, que establecen los criterios generales para su colocación. Para ello, tienen en cuenta factores como la densidad de población de la zona, el tipo de vía, la accesibilidad y la proximidad a puntos sensibles como colegios o centros de salud.
Además, la gestión de residuos en áreas urbanas también está influenciada por características socioeconómicas, como la presencia de negocios y establecimientos comerciales, así como las particularidades demográficas de la población que reside en la zona. Esto determina tanto la cantidad como el tipo de residuos generados, así como las necesidades específicas en términos de infraestructura y servicios de recolección.
Proximidad al usuario
Según aparece en la web del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, los puntos de recogida de residuos ordinarios, que abarcan las cinco fracciones de separación, deben estar ubicados lo más cerca posible de los usuarios, con una distancia máxima de 100 metros. Que haya suficiente cantidad de contenedores y que se retiren con frecuencia son esenciales para asegurar la accesibilidad y para evitar el desbordamiento de residuos, con todo los problemas que ello genera. Pero ¿qué pasa si perjudican a los residentes cercanos?
Cómo cambiar los contenedores de basura junto a tu casa
Uno de los requisitos para poder lograr el cambio es que la ubicación de los contenedores te perjudique. Por ello, lo aconsejable es que reúnas pruebas de los efectos negativos que te ocasiona tener los contenedores de basura al lado de tu casa (fotografías, grabaciones, informes de salud, etc.).
Después, tienes que comunicar el problema al ayuntamiento al que pertenezca tu vivienda. Muchos ayuntamientos tienen a disposición de los interesados un formulario diseñado para tal fin, como el de Algete, Madrid. Si no encuentras el documento, llama y pregunta cómo hacer la solicitud.
Si tu petición no parece prosperar, tendrás que elevar tu queja al Defensor del Pueblo. Este organismo ha resuelto muchos problemas relacionados con la ubicación de los contenedores, por ejemplo, este caso en Marbella o este en Sevilla. La última palabra sobre cambiar de sitio los contenedores de basura o no la tiene el ayuntamiento al que correspondan. En caso de negativa, solo el Defensor del Pueblo puede conseguir solucionar el problema.
Fuente. Eduardo G. Martínez (Idealista News)